Bismillahir Rahmanir Rahim
Las raíces de la conducta tienen cuatro aspectos: conducta con Dios, conducta con uno mismo, conducta con las personas y conducta con este mundo. Cada uno de estos aspectos se basa en siete principios. Hay siete principios de conducta con Dios: dar a Dios lo que le corresponde, mantener sus límites, estar agradecido por su don, estar contento con su decreto, ser paciente con sus pruebas, glorificar su santidad y anhelarlo.
Los siete principios de la conducta con uno mismo son reducir el miedo, esforzarse, soportar el daño, abrazar la disciplina espiritual, buscar la veracidad y la sinceridad, apartarse del yo de lo que ama y atarlo a la pobreza.
Los siete principios de conducta con las personas son tolerancia, perdón, humildad, generosidad, compasión, buen consejo, justicia y equidad.
Los siete principios de conducta con este mundo son contentarse con lo que está a la mano, preferir lo que está disponible a lo que no está, abandonar la búsqueda de lo esquivo, odiar la sobreabundancia, elegir la abstinencia, conocer los males de este mundo y abandonar cualquier deseo de ellos, y negando su dominio.
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