lunes, 30 de abril de 2018
Sobre el amor y la retribución
No cabe duda que el amor que espera un resarcimiento no es amor, es solamente un artificio para satisfacer las propias necesidades. Quien ama a alguien para que le dé o buscando conseguir algo solo se ama a sí mismo porque si no fuera por la retribución que espera no lo amaría.
Dijo Abu Muhammad Ruwaym, Dios se complazca con él: "A quien ama por la retribución su amado le hará amarga esa retribución". "El que busca la retribución no es sino un comerciante que da para recibir; el amante [verdadero] muere en el amor a Su señor y no concede a ningún otro su complacencia"...
-Fragmento de Las Máximas de Sabiduría, Ibn Ata Allah
jueves, 26 de abril de 2018
Cuando Él quita una cosa
"Cuando Él quita una cosa,
Él te dará algo mejor.
Al hacer eso, Él les quitará un mal futuro.
Él podría quitarte tus relaciones, tus apegos,
en qué te apoyas, en qué confías,
si te causarán sufrimiento en el futuro.
Él es quien sabe eso.
Por lo tanto, no tiembles, Oh mente.
Necesitas paciencia, sabur, shucker, tawakkul,
paciencia interna, satisfacción, rendición a Dios.
Alábalo con al-hamd.
Piensa en Él siempre.
Busca Su responsabilidad
Encuéntrenlo con amor.
Más tarde lo entenderás.
Más tarde comprenderás la gran riqueza que te han dado".
-Fragmento de "La vida es un sueño, un libro de versos sufíes"
Muhammad Raheem Bawa Muhaiyaddeen (ra)
*Al-hand = el sentimiento de gratitud
lunes, 23 de abril de 2018
Servir es la gran cosa
En un poema escrito por Ali Riza Sagman, hay una línea que dice: “En el camino de la Unidad a pesar de todos mis esfuerzos me quedo pobre. ¿Qué tengo que dejar? Entonces, vine a ofrecer mi vida, Ya Resulallah”.
(La ultima estrofa se traduce así "canımı kurbane geldim")
La vida ha sido ofrecida. Pero esta palabra "kurban" no significa sacrificar una vida, significa acercarse. La palabra kurban (o qurban) viene de qurbiyyat, cercanía. Ésta es la solución al problema, la salvación, es la cercanía de Resulallah (saws); no en el sacrificio, en morir.
Morir no es la gran cosa; servir es la gran cosa. Uno trabaja para estar cerca y ganar la aceptación de Resulallah (swas). En el proceso de construir la cercanía debemos recordar que vivimos en un mundo de materia. Todo tiene figura y forma, las necesidades vienen de esta materia. Una de las más grandes necesidades de esta materia está en el ojo. El deseo del ojo de ver una cara hermosa. El deseo del ojo de ver a un ser querido.
En zikrullah repetimos algunos esma (nombres) de Allah. Algunas personas preguntan: “Ustedes se mantienen llamando Su nombre, ‘Allah, Allah, Allah,’ ¿pero no le piden nada?”
La respuesta es muy simple. Si tu vas a la ventana de tu amada y la llamas “Oh mi belleza, oh mi belleza” miles de veces, finalmente ella aparecerá en la ventana y te mostrará su rostro. Es lo mismo; durante el zikrullah, con el esma estamos buscando la manifestación de Sí mismo. También podemos disfrutar de la presencia de Resulallah (saws) cuando hacemos salawat.
De todas maneras, debemos estar en un estado de reverencia cada vez que pronunciamos su nombre; no es lo mismo que estar llamando a un amigo, a tu vecino. Ahora él está aquí, porque lo hemos nombrado. Lo llamamos, nos conectamos con él. Él viene y nos honra. Cuando le damos salawat en ese estado, él nos honra con su presencia.
Un derviche fue a un sheyk y le dijo: “Mi sheyk, quiero ver a Resulallah en un sueño, pero no he podido hacerlo”. Él le contesta, “Es fácil, ve y compra pickles, pescado y un poco de queso, cómelos y vete a dormir”. El derviche hizo lo que el sheyk le dijo y se fue a dormir. A la mañana siguiente cuando se despertaron para el rezo de la mañana, el sheyk le preguntó: “Entonces ¿Qué pasó?”
El derviche contestó, “¡Oh mi querido sheyk, durante toda la noche hasta la mañana estuve viendo cascadas, bebidas heladas, ríos, jugos, vasos con líquido!” El sheyk respondió, “¡Eso es! Si estuvieras así de sediento por Resulallah (swas), lo verías”.
-Sheikh Tuğrul Efendi (Fragmento de sobhet 2007)
*zikrullah = dikr, remembranza de Dios
*salawat = rezo
jueves, 19 de abril de 2018
Una única alegría
"La tristeza es parte de tu naturaleza, parte de tu vida.
No debes prestarle mucha atención.
Tienes que experimentar todo, ir más allá,
y saber que Dios es el Tesoro, es nuestra única alegría.
No debes prestarle mucha atención.
Tienes que experimentar todo, ir más allá,
y saber que Dios es el Tesoro, es nuestra única alegría.
Cuando estamos en busca de ese Tesoro, no debemos darle mucha atención a esas otras experiencias. Ellas son solo el mundo.
No importa dónde estemos, así es como es.
Tenemos que conquistar todo esto e ir más allá.
Aparte de Dios, todo lo demás que vemos es tristeza.
No importa dónde estemos, así es como es.
Tenemos que conquistar todo esto e ir más allá.
Aparte de Dios, todo lo demás que vemos es tristeza.
Hasta que sepamos cuál es la verdadera alegría y
hasta que nos fusionemos con eso,
tenemos que experimentar todas estas tristezas, déjalas y continuar.
Esa es la explicación de la sabiduría,
la explicación del amor.
Debes darte cuenta de esto".
hasta que nos fusionemos con eso,
tenemos que experimentar todas estas tristezas, déjalas y continuar.
Esa es la explicación de la sabiduría,
la explicación del amor.
Debes darte cuenta de esto".
- Muhammad Raheem Bawa Muhaiyaddeen (ra)
Fragmento de "Una oración de mi corazón"
Fragmento de "Una oración de mi corazón"
lunes, 16 de abril de 2018
Vacía todo
jueves, 12 de abril de 2018
Una única existencia
El verso de un
poema dice: "Varligim zembim biraktim"
"Entrego toda mi
existencia y todo mi ser a Dios"
Hz. Ismail
Mashuki era un pequeño niño cuando dijo sobre este verso, “¿Cómo podemos dar si
no poseemos nada en primera instancia?”
Pensar que hay
existencia, es un gran error. La única existencia que hay, es Dios. El único
que no depende de nada es sólo Dios. Existimos sólo por Él. Él es absoluta
existencia, la nuestra es relativa. Somos, sólo porque él dijo “Kun” (“Se”).
Esta existencia aparece sólo cuando Él dice “Kun”.
Sobre la creación
de nuestro nafs, Allah-u Teala preguntó: “¿Quién eres tú y quién soy yo?” Y el
nafs dijo: “Tú eres tú, yo soy yo”. Entonces, Allah-u Teala puso al nafs en un
infierno caliente. Lo sacó y le volvió a preguntar: “¿Quién eres tú y quién soy
yo?” Y el nafs respondió: “Tú eres tú, yo soy yo”. Entonces Allah lo puso en un
infierno helado y le preguntó otra vez: “¿Quién eres tú y quién soy yo?” Y el
nafs respondió: “Tú eres tú, yo soy yo”. Entonces, Allah lo hizo ayunar. Y
luego le preguntó: : “¿Quién eres tú y quién soy yo?” Y el nafs respondió: “Tú
eres el Señor de los Mundos y yo soy un mendigo necesitado”.
Disciplina,
ayunar, es parte de esto, hace al ego ver al Señor a través del sufrimiento y
el miedo de la aniquilación.
Sheikh Tuğrul Efendi (Fragmento de sobhet 2007)
jueves, 5 de abril de 2018
Un recordatorio
Un discípulo fue
a visitar a su Sheykh para pedirle un consejo, ya que le había salido un
trabajo en otra ciudad y debía partir hacia allá. Le respondió el Sheykh:
"Oh hijo mío, ya has aprendido todo lo que te he enseñado, pero aún así
tengo un consejo para darte. Todos los días de tu vida recuérdate a ti mismo
tres veces:
"Aún no he
podido transformarme en un buen y verdadero ser humano"
lunes, 2 de abril de 2018
Sobre el orgullo y la humildad
El Profeta Muhammad
(saws) decía: "Si no existiera el pecado, yo temería lo peor para los hombres". Este "peor" es el orgullo, el sentimiento de suficiencia que
constituye uno de los principales obstáculos para el progreso espiritual.
La humildad es la
única condición absolutamente necesaria para el que pretende iniciar y seguir
un camino espiritual. Ponerse en condición de recibir es aceptar la idea que
nada nos pertenece, que todo puede
sernos dado y quitado de igual forma.
Es aprender a escuchar y recibir, antes que dar y actuar; no es buscar como hacer o tomar sino, en realidad, leer los signos que se nos envían; aceptar lo que llega tal como llega.
Lo enviado es siempre más importante que lo que uno desea. Sidi Hamza nos dice: "No hace falta preguntar el porqué o comentar sino dejarse guiar".
Es aprender a escuchar y recibir, antes que dar y actuar; no es buscar como hacer o tomar sino, en realidad, leer los signos que se nos envían; aceptar lo que llega tal como llega.
Lo enviado es siempre más importante que lo que uno desea. Sidi Hamza nos dice: "No hace falta preguntar el porqué o comentar sino dejarse guiar".
No pierda su
tiempo en cuestionar. Mientras uno continua juzgando a los hombres o las
situaciones uno se encuentra en la limitada esfera del Ego. Aquél que proyecta
sobre cada cosa su experiencia y sus valores sin darse la oportunidad de
descubrir esa realidad que es la suya se empobrece y queda encerrado en la que
ya conoce. Se trata de abrirse a otra forma de conocimiento.
Sidi Hamza dice al respecto: "Mirad
a vuestros hermanos como seres perfectos por el simple hecho de estar dentro del
camino. Poco a poco os daréis cuenta de que la Creación entera es perfecta, y
esta magnificación se extenderá a todas las cosas".
Suscribirse a:
Entradas (Atom)