lunes, 26 de noviembre de 2018
El amor de Dios
"El amor florece en el corazón en el que brilla el Nombre de Dios. El amor de Dios es la fragancia que ni siquiera mil envolturas pueden contener. O como un río que no puede ser detenido en su curso. Mi amigo está en mí, en Mi amigo soy -no hay separación entre nosotros-."
-Sultan Bahu
jueves, 22 de noviembre de 2018
De la oscuridad
jueves, 15 de noviembre de 2018
Sobre nuestras faltas y ejemplos
bismillah
Los profetas y los santos son como espejos; igual que el espejo nos muestra la suciedad de nuestros semblantes, así los hombres y mujeres santos nos muestran nuestras faltas.
Un viejo refrán dice: “Límpiate la cara en lugar de culpar al espejo”. Pero la mayoría de nosotros preferimos romper el espejo antes de abandonar nuestras malas costumbres.
Los profetas y los santos son como espejos; igual que el espejo nos muestra la suciedad de nuestros semblantes, así los hombres y mujeres santos nos muestran nuestras faltas.
Un viejo refrán dice: “Límpiate la cara en lugar de culpar al espejo”. Pero la mayoría de nosotros preferimos romper el espejo antes de abandonar nuestras malas costumbres.
lunes, 12 de noviembre de 2018
¿Qué vemos?
bismillah
"...Cuando el misterio de la esencia de los seres se muestre claramente, el horno del mundo se convertirá en un jardín de flores. El adepto verá la almendra aunque esté rodeada de su cáscara. Ya no se verá más a él mismo, no percibirá más que a su Amigo; en todo lo que vea, verá Su cara; en cada átomo, verá El Todo; contemplará bajo el velo millones de secretos tan brillantes como el sol".
jueves, 8 de noviembre de 2018
Completa tu realidad
Completa tu realidad, que no es perfecta;
al cuerpo, déjalo en la falda más baja de tu montaña.
¿Guiarás a lo alto lo que ha de quedar atrás,
abandonando tu verdad a la fortuna?
Mas su asunto, no te ha interesado.
El cuerpo es para la apreciada vida una herramienta,
pero lo que no consigas con tu esencia no habrás de lograrlo.
Acabará muerto tu cuerpo mientras tú permanecerás,
y tu vida será elogiable o desdichada en un sufrimiento infinito.
La has dado como servidora al cuerpo, y la has esclavizado,
olvidando tu compromiso primero en el tiempo anterior.
Has entronizado al esclavo, desatendiendo tu perfección:
pero, ¿es sensato encadenar al mejor?
‘Izz ad-Dîn al-Arbîli
lunes, 5 de noviembre de 2018
No te metas en asuntos ajenos
Bismillah
Todos queremos saber qué ocurre con los demás. Nos preocupamos de los asuntos de los demás a la vez que olvidamos los nuestros. Hablamos de los defectos de fulano y nos olvidamos de los nuestros. Juzgamos sus acciones y olvidamos las nuestras. Nos entrometemos en los asuntos de otros y olvidamos los nuestros.
“Se fija uno en la motita de polvo que hay en el ojo de su hermano y se olvida del gran trozo de madera que hay en el suyo”. -Hz. Isa (ra)
Lo cierto es que los avances tecnológicos nos permiten en unos segundos saber qué hace cualquier persona… una distracción extraordinaria para evitar nuestros propios asuntos! ¿No es verdad? Esta no es la enseñanza de nuestro Din.
El Profeta Muhammad (swas) dijo: “Parte del buen Islam de la persona es dejar lo que no le concierne”.
Tenemos que reflexionar sobre esto... ¿Desde dónde juzgamos a los demás?¿Qué ejemplo damos que nos creemos con el poder de opinar de otros con tanta ligereza?¿Qué derecho tenemos sobre otro hermano?
¿Qué nos concierne? Lo que nos incumbe es cumplir con aquello que Allah exige de nosotros, cumplir con los derechos que nuestro Creador tiene sobre nosotros, al mismo tiempo que cumplimos con los derechos que las criaturas tienen sobre nosotros, sin que deba importarnos si el resto de la gente cumple con sus obligaciones, pues eso no nos incumbe. Eso es asunto de Allah con cada uno, y por ello se nos pedirán cuentas de nuestras acciones.
En otro hadiz indica: “El musulmán es aquel que libra a los musulmanes de su lengua y de su mano”.
Allah nos de claridad y nos libre de estas faltas. Amin.
Todos queremos saber qué ocurre con los demás. Nos preocupamos de los asuntos de los demás a la vez que olvidamos los nuestros. Hablamos de los defectos de fulano y nos olvidamos de los nuestros. Juzgamos sus acciones y olvidamos las nuestras. Nos entrometemos en los asuntos de otros y olvidamos los nuestros.
“Se fija uno en la motita de polvo que hay en el ojo de su hermano y se olvida del gran trozo de madera que hay en el suyo”. -Hz. Isa (ra)
Lo cierto es que los avances tecnológicos nos permiten en unos segundos saber qué hace cualquier persona… una distracción extraordinaria para evitar nuestros propios asuntos! ¿No es verdad? Esta no es la enseñanza de nuestro Din.
El Profeta Muhammad (swas) dijo: “Parte del buen Islam de la persona es dejar lo que no le concierne”.
Tenemos que reflexionar sobre esto... ¿Desde dónde juzgamos a los demás?¿Qué ejemplo damos que nos creemos con el poder de opinar de otros con tanta ligereza?¿Qué derecho tenemos sobre otro hermano?
¿Qué nos concierne? Lo que nos incumbe es cumplir con aquello que Allah exige de nosotros, cumplir con los derechos que nuestro Creador tiene sobre nosotros, al mismo tiempo que cumplimos con los derechos que las criaturas tienen sobre nosotros, sin que deba importarnos si el resto de la gente cumple con sus obligaciones, pues eso no nos incumbe. Eso es asunto de Allah con cada uno, y por ello se nos pedirán cuentas de nuestras acciones.
En otro hadiz indica: “El musulmán es aquel que libra a los musulmanes de su lengua y de su mano”.
Allah nos de claridad y nos libre de estas faltas. Amin.
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